British Association for Counseling and Psychotherapy
El color rojo ha sido signo de poder y nobleza, ira, agresividad, amor, pasión e incluso, en algunas culturas orientales, felicidad. Desde los estudios de la psicología del color, se ha demostrado que el rojo capta nuestra atención de una manera muy notable y estimula mucho el sentido de la vista.
«Los colores cálidos, como el naranja, rojo o amarillo lo que hacen en algunas personas es suscitarles emociones como calidez o enfado, mientras que los colores fríos, como el verde o el azul, suelen dar sensación de calma pero también de tristeza y frialdad», indica la psicóloga de El Prado Psicólogos.
Rojo: Como aspectos positivos, este color refleja energía, pasión, dinamismo, estímulo, coraje. Y en su parte más negativa, denota exceso, agresividad, temperamento y peligro.
La mujer de rojo es no solo atractiva.. la que ama el rojo, es porque siente el poder de rojo por dentro y lo luce por fuera, sin miedo. Fuerte, enérgica, invencible.. Por ser el color de la sangre, el rojo se asocia muchas veces también a la agresividad, la ira y la guerra.
Significado de los colores Rojo: pasión, violencia, fuego, seducción, poder, activo. Amarillo: armonía, sabiduría, agilidad, brillante. Azul: estabilidad, confianza, masculino, racionalidad. Naranja: felicidad, entusiasmo, creatividad, éxito.
La psicología del color amarillo es aquella que está relacionada con los efectos que produce este color en el ser humano. El amarillo es un color asociado a la energía, la riqueza, el calor e incluso la felicidad. Además, se trata de un color primario muy utilizado en el ámbito de la publicidad.
El rojo era el color tradicional del movimiento obrero, que utilizaron también los denominados partidos obreros, por ello el anarcosindicalismo tuvo que completar el mensaje de su bandera, añadiéndole el negro, que tradicionalmente venían utilizando los movimientos obreros anarquistas.
El rojo simboliza el amor y por tanto es el color por excelencia de San Valentín. – Es el color del corazón y por tanto de las emociones. Por eso se asocia con el Día de San Valentín en culturas de todo el mundo.
La relación entre los colores y la personalidad se puede entender de la siguiente manera: cada color o tonalidad produce un efecto o una sensación en nuestra mente. Pongamos un ejemplo: una persona que prefiera el color rojo, probablemente tenga una tendencia a ser más pasional y agresiva.
Los colores cálidos producen el efecto de expansión, por lo que son salientes cuando contrastan con otros; avanzan hacia el observador. Por el contrario los fríos absorben la luz, son entrantes y dan la impresión de alejamiento.
El verde, además de transmitir tranquilidad y calma, se asocia con la naturaleza, prosperidad, fertilidad, salud, y generosidad. Sin embargo, como ocurre con los demás colores, otras connotaciones negativas como la envidia y los celos son asociados al color verde.
Verde: es el color de la vida y de la esperanza.